Basta de determinismo

En primer lugar, antes de introducirnos en la materia que nos ocupa en esta entrada, vamos a definir o aclarar a lo que nos referimos cuando hablamos de determinismo en genética, y a definir el término de genética.

La genética es la rama de la biología que se encarga de estudiar los genes y los mecanismo reguladores de la transmisión de los caracteres hereditarios.

El determinismo en genética es la teoría bilógica que defiende que las características por las que nos identificamos los seres humanos son culpa de genes específicos, y modificar estas características es extremadamente complicado si no es por el medio genético.

La culpa de la creencia en el determinismo posiblemente sea por la definición que se ha dado a la epigenética de superioridad, es decir, estar “por encima de los genes”.

La epigenética rama de la biología que se encarga del estudios de los factores no genéticos que se dan en el desarrollo y que no se pueden relacionar con alteraciones en la secuencia del ADN.

Sin embargo, no solo son los factores no genéticos los que modifican el ADN, como defiende el determinismo, sino que también influyen:

• Las histonas, sus modificadores postraduccionales, los remodeladores de cromatina y los ARN no codificantes, construidos en función de la secuencia de ADN.
• El ambiente.

 

Otro mal entendido con esta definición es el rasgo de heredabilidad. La condición que se le imponía a a la epigenética era que la modificación de la expresión genética tenía que transmitirse a la descendencia, pero la transmisión de estas modificaciones nunca se ha visto más allá de la impronta genómica, es decir, la expresión de los genes dependiendo del sexo del individuo.

Por otra parte, la heredabilidad no se refiere solo a la transmisión a la descendencia, sino que en términos celulares, que estos cambios se mantengan tras la división celular de la mitosis o tras la meiosis, pero en este últimos casos nos meteríamos en temas de la progenie.

Debido a la incapacidad de separar los términos de genética y epigénetica, y proteínas de genes, las definiciones de epigenética se han ido modificando con el paso del tiempo.

En conclusión la epigenética debe incluir modificaciones en el genoma que no alteren la secuencia pero que sí se trasmita a las células resultantes de la original. Las cuales poseerán un fenotipo distinto debido a la interacción entre el genotipo y el ambiente.

Sin embargo no debemos exacerbar el factor del ambiente como motivo de modificaciones, ya que esto formaría parte de un pensamiento determinista.